Aguaymanto
El aguaymanto es una fruta considerada un superalimento, la cual no es muy conocida en España, pero que, sin embargo, en Sudamérica sí que es mucho más habitual ya que es originaria de este continente.
Pese a que en la actualidad los superalimentos se encuentran de moda, lo cierto es que han sido empleados desde tiempos muy remotos para el tratamiento de diversas enfermedades y por sus propiedades beneficiosas.
¿Qué es el aguaymanto?
Como ya hemos comentado, el aguaymanto es una fruta originaria de Perú. Su nombre científico es Physalis peruviana, y pertenece a la familia de las solanáceas (a la cual pertenecen también las patatas, los tomates, los pimientos… o el tabaco).
Esta fruta es de tamaño pequeño, redonda de tipo baya y de color anaranjado, que se desarrolla dentro de una cápsula formada por los sépalos de la flor, de forma que le sirve de protección contra depredadores y las inclemencias del tiempo.
Se desarrolla a una altitud entre 1800 y 3000 metros sobre el nivel del mar, y a una temperatura media de 15 grados aproximadamente.
En inglés, al aguaymanto se le conoce como Golden Berry (en referencia a su color y a su forma). En otros países de Centro y Sudamérica se le conoce como Uchuva, Uvilla, Capulí, Tomatillo, Lulo, Topotopo o Cereza del Perú.
Actualmente, otros países se han lanzado al cultivo de esta planta, como por ejemplo Nueva Zelanda, Australia, China, India o Malasia.
Elementos nutricionales del aguaymanto
Como no puede ser de otra manera, el aguaymanto es capaz de ofrecer una serie de propiedades muy beneficiosas para mejorar nuestro estado de salud.
Fuente de vitaminas
El aguaymanto contiene una gran cantidad de vitaminas, nutrientes esenciales y necesarios para el correcto funcionamiento nuestro organismo.
Así pues, dentro de las vitaminas podemos encontrar:
Vitamina A
Una de las funciones más importantes de la vitamina A es la de ayudar a que nuestra vista se mantenga en buen estado durante más tiempo.
También es un excelente antioxidante retasando el envejecimiento celular.
Vitaminas del grupo B
Estas vitaminas son esenciales para mantener el metabolismo activo, y así poder obtener energía de forma rápida y eficiente. Ello se debe a que intervienen en el metabolismo de grasas y de carbohidratos.
Otra función que cumplen es la de ayudar a que el sistema nervioso actúe de manera correcta, y también influye en el adecuado funcionamiento del sistema circulatorio.
Vitamina C
El aguaymanto es especialmente rico en esta vitamina necesaria para el refuerzo del sistema inmunológico, de forma que podremos evitar padecer resfriados fácilmente, además de prevenir infecciones.
También ejerce un papel antioxidante en el organismo, previniendo el envejecimiento celular. Potencia la absorción de hierro durante la digestión y protege las mucosas del cuerpo.
Fuente de minerales
Otro de los nutrientes esenciales para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Los minerales que contiene el aguaymanto en proporción notable son:
Hierro
Mineral esencial para el transporte de oxígeno en la sangre a todos aquellos puntos del organismo en los cuales es necesario, como por ejemplo, los músculos, algo fundamental durante la actividad física.
El hierro es el mineral esencial para combatir la anemia, problema más frecuente de lo que creemos debido a las dietas de poca calidad que se suelen seguir en la actualidad.
Un nivel bajo de hierro impedirá que nuestro rendimiento deportivo sea el adecuado.
Fósforo
El fósforo, junto al calcio, forma parte de nuestros huesos y dientes. Su aporte resulta esencial para que no se produzca una desmineralización de los huesos.
También forma parte de las paredes de nuestras células, y en ellas se encarga de regular el equilibrio ácido-base.
Calcio
Como ya hemos dicho, el calcio forma parte de los huesos y de los dientes. Además, también es necesario para que la sangre se coagule correctamente, y participa en la transmisión de impulsos nerviosos.
Otra de sus funciones es la de intervenir en la absorción de la vitamina B12.
Fuente de ácidos grasos
Las grasas son un nutriente necesario, especialmente aquellas que son catalogadas como “grasas buenas” o insaturadas.
Entre estas grasas buenas encontramos los ácidos linoleico y oleico.
Ácido linoleico
El aguaymanto contiene ácido linoleico, el principal componente del Omega 6. Se trata de un nutriente esencial que se encarga de potenciar el sistema inmunológico.
Forma parte de las membranas celulares, interviene en la generación de determinadas hormonas, y también forma parte de nuestra retina, por lo que ayuda a mejorar la visión.
Una de las funciones más importantes, y también de las más buscadas en este elemento que contiene en el aguaymanto, es el hecho de que interviene en la asimilación de las grasas, haciendo que están sean aprovechadas de una forma más efectiva.
Ácido oleico
En este caso tenemos un ácido graso monoinsaturado perteneciente al grupo de los Omega 9.
Este ácido ayuda a proteger el sistema cardiovascular, ya que permite equilibrar los niveles de colesterol aumentando el nivel de colesterol HDL (el bueno).
Información nutricional del aguaymanto fresco (por cada 100 gramos)
- Energía: 53 kcal
- Hidratos de carbono: 14 g
- Proteínas: 0,05 g
- Grasas: 0,16 g
- Calcio: 8 mg
- Hierro: 1,23 mg
- Fósforo: 55,30 mg
- Niacina (Vitamina B3): 1,73 mg
- Riboflamina (Vitamina B2): 0,03 mg
- Retinol (Vitamina A): 36 μg
- Vitamina C: 11 mg
- Agua: 85 g
Propiedades del aguaymanto
Una vez conocidos los principales nutrientes que contiene el aguaymanto, es el turno de hablar acerca de las propiedades beneficiosas que nos puede ofrecer este superalimento, y que, lógicamente, van a estar relacionadas con estos nutrientes.
Ayuda a controlar la hipertensión
Debido a su contenido en ácidos grasos insaturados, el aguaymanto puede ayudar a controlar la hipertensión provocada por unos niveles de colesterol elevados, siempre y cuando se siga una alimentación adecuada para alcanzar este propósito.
Ayuda a prevenir ciertas enfermedades e infecciones
Su contenido en vitaminas A, C y ácido linoleico hace que nuestro sistema inmunológico se vea reforzado, ayudando a prevenir resfriados e infecciones.
Seguir una dieta rica en estos elementos será la mejor forma contar con una salud de hierro.
Asímismo, el aguaymanto puede ayudar también a aliviar los síntomas de algunas enfermedades respiratorias como son el asma y la bronquitis.
Ayuda a retrasar el envejecimiento
El aguaymanto contiene una cantidad notable de antioxidantes. Nuestras células constantemente se ven sometidas al ataque de radicales libres, los cuales provocan su envejecimiento.
Que las células envejezcan es algo natural, el problema existe cuando estos radicales libres aceleran este proceso.
Incluir aguaymanto en la dieta ayudará a que la acción de estos radicales libres no sea tan efectiva.
Beneficioso para los diabéticos
El aguaymanto contiene una serie de compuestos llamados flavonoides, los cuales ayudan a que se pueda generar insulina de una forma más efectiva.
Gracias a ello se puede reducir el nivel de azúcar en sangre.
Esto, unido a medidas que puedan ayudar a aumentar la sensibilidad a la insulina por parte de los receptores de la misma, será algo a tener en cuenta por aquellas personas que padezcan diabetes tipo II.
Otras propiedades
Además de todas estas propiedades, el aguaymanto se ha venido empleando para aliviar los síntomas producidos por la menopausia, algo a tener en cuenta por las mujeres que llegan a esta etapa de su vida.
Relacionado con las mujeres también, el aguaymanto puede ayudar también a aliviar las molestias y dolores que aparecen durante el período menstrual.
Su contenido en calcio y en fosforo ayuda a fortalecer nuestros huesos y dientes, como hemos comentado anteriormente al hablar de estos minerales.
Al ser un alimento diurético, permite que se eliminen líquidos retenidos en aquellas personas que padecen este tipo de problema, además de depurar los riñones.
También sirve como ayuda en el tratamiento de problemas de próstata debido a estas propiedades diuréticas, y como depurador de la sangre y del organismo al ayudar a eliminar toxinas.
Su contenido en azúcares convierte al aguaymanto en un excelente energizante, además de permitir a nuestra mente que se despeje. Ideal en épocas de estudios o de elevado estrés, algo tremendamente habitual en nuestra época actual.
Gracias a su contenido en fibra ayuda a mejorar las digestiones, y a regular el tránsito intestinal.
Por último, su contenido en vitamina C hace que nuestro organismo cuente con una mayor capacidad de cicatrización cuando se ha producido una herida.
Formatos en los que se puede comprar el aguaymanto
Como ocurre con la mayoría de los superalimentos, el aguaymanto se puede comprar en diferentes formatos.
Cada uno de estos formatos va a presentar unas características diferentes, por lo que es importante tener conocimiento de los mismos:
Aguaymanto fresco
Se trata del fruto de la Physalis peruviana en estado natural, como cualquier otra fruta que adquirimos en un establecimiento.
En Sudamérica, especialmente en Perú, es muy habitual poder encontrar aguaymanto en estado natural; sin embargo, en Europa en algo más complicado, aunque poco a poco son más los establecimientos que se animan a importar este superalimento.
Un consumo recomendado de aguaymanto fresco es de 5 – 7 piezas al día.
Importante: va a ser necesario que los aguaymantos se encuentren en un estado de maduración óptimo, ya que si se encuentran verdes, de la misma forma que ocurre con el resto de solanáceas, contendrá solanina.
Esta sustancia es tóxica para el organismo, y en cantidades notables puede llegar a causar problemas debido a una intoxicación.
Aguaymanto deshidratado
El aguaymanto deshidratado es un producto más fácil de encontrar en herboristerías y tiendas de dietética, ya que se conserva en perfecto estado durante mucho más tiempo, lo que hace posible su importación.
En este caso se trata de un producto más calórico (ya que no contiene agua), y su aspecto es similar al de las pasas.
Es el formato ideal si con ellos queremos preparar, por ejemplo, barritas energéticas naturales.
Jugo de aguaymanto
Como ocurre con muchas otras frutas, es posible adquirir jugo o zumo de aguaymanto. En este caso se debe tener cuidado con abusar del mismo, ya que la cantidad de azúcar que estaremos ingiriendo será mayor que en caso de la fruta natural al eliminar la parte fibrosa.
Una vez que hemos conocido las propiedades del aguaymanto es el momento de valorar incluir este superalimento en nuestra dieta para disfrutar de todos los beneficios que podemos obtener.
Todos ellos van a resultar de gran utilidad, especialmente en los casos de personas deportistas que buscan incrementar su rendimiento deportivo, y para lo cual la alimentación es un pilar clave.
Sin una buena alimentación no hay un aporte adecuado de nutrientes, y sin estos nutrientes no se puede obtener un rendimiento deportivo óptimo.
Incluir superalimentos como el aguaymanto permitirá poder conseguir ese aporte de nutrientes.