Propiedades de la granada. Descubre todos sus beneficios

La granada es una fruta que en los últimos tiempos ha adquirido una enorme popularidad dentro de la población en general, y ello se debe a que es considerada un superalimento, como por ejemplo las semillas de chía, la maca o el cacao.

Esta fruta contiene una gran cantidad de vitaminas, minerales y otros nutrientes, además de poder ser consumida de muy diferentes formas, lo que permite que sea un superalimento muy versátil.

Saber alimentarse correctamente gracias a la nutrición deportiva es algo fundamental para cualquier persona deportista, entrenador personal, o que esté relacionada con el mundo del deporte.

1. ¿Qué es la fruta de la granada?
   1. ¿Y cuándo madura la granada?
2. ¿Qué propiedades tiene la granada?
   1. Ayuda a reducir los niveles de colesterol
   2. Ayuda a prevenir la aparición de osteoartritis
   3. Protege la piel
   4. Ayuda a las personas con diabetes
   5. Las semillas son un buen afrodisiaco
   6. Ayuda a depurar los riñones
   7. Ayuda a reducir la tensión arterial
3. Propiedades de la granada para la piel
   1. Ayuda a prevenir el acné y a reducirlo
   2. Retrasa el envejecimiento de la piel
   3. Puede que ayude a prevenir el cáncer de piel
   4. Ayuda a controlar la psoriasis y los eccemas
   5. Es un buen hidratante
4. Valor nutricional de la granada
5. Contraindicaciones del consumo de granada
   1. Intoxicación
   2. Interacción con otros medicamentos
   3. Alergia a la granada
6. ¿Cómo se consume la granada?

¿Qué es la fruta de la granada?

Lo que conocemos como granada es el fruto del árbol Punica granatum, especie muy habitual a lo largo de gran parte de la geografía española, especialmente en toda la vertiente mediterránea.

Se trata de un fruto de gran tamaño, más grande que, por ejemplo, una manzana; de color amarillento y que en su interior alberga gran cantidad de semillas recubiertas por una pulpa de color rojo intenso, y que es la que le da el sabor a esta fruta.

Dependiendo de la variedad vamos a poder obtener granadas desde finales de agosto hasta el mes de diciembre, de forma que a lo largo de todo el otoño vamos a poder disfrutas de este valioso superalimento.

Las propiedades de la granada nos van a permitir beneficiarnos en muchos aspectos de nuestra salud, bienestar y vida diaria.

Entre estas propiedades destacamos:

• Reducir los niveles de colesterol
• Ayudar a prevenir la aparición de osteoartritis.
• Protege la piel contra los rayos UV.
• Es de gran ayuda para las personas que padecen diabetes.
• Sus semillas pueden llegar a ser un excelente afrodisiaco.
• Ayudan a depurar los riñones.
• Colabora a la hora de reducir la tensión arterial.

La granada contiene ácidos grasos omega 3. Este tipo de grasas ayuda a nuestro organismo a equilibrar los niveles de colesterol LDL (el perjudicial o “colesterol malo”) y de colesterol HDL (el que conocemos como “colesterol bueno”).

Además del omega 3, la granada contiene otro elemento que ayudan a esta reducción del colesterol malo, como es la punicalagina, un elemento característico de la granada.

Este beneficio va a afectar directamente a nuestro corazón y al sistema circulatorio, permitiendo que el flujo sanguíneo no se vea obstaculizado en ningún momento a causa de la acumulación de grasa en venas y arterias.

Hay estudios que afirman que la granada es capaz de ayudar a prevenir la aparición d enfermedades que afectan a las articulaciones, como son la osteoartritis o la artritis.

Esto se debe a que ayuda a reducir la degeneración del cartílago presente en las articulaciones, debido a que inhibe algunas enzimas y proteínas responsables de ello.

Si queremos cuidar la piel, la granada es una de las mejores frutas por las cuales podemos optar. Tales son sus efectos y beneficios en este sentido que vamos a dedicar, más adelante, un apartado específico para esta propiedad.

Como avance diremos que estas propiedades se deben mayormente a su rico contenido en antioxidantes, los cuales protegen las células de todo nuestro organismo.

La granada puede ayudar a las personas diabéticas a controlar esta enfermedad. Y es que los compuestos antioxidantes que posee este superalimento ejercen un efecto positivo sobre los síntomas y procesos de esta enfermedad.

Estos antioxidantes generan una actividad hipoglucémica, inhibiendo algunos marcadores genéticos y algunos compuestos como la enzima glucosidasa.

Dentro de los elementos antioxidantes que ejercen este tipos de acciones destacan los polifenoles.

Cuando comemos granada ingerimos también sus semillas. Ya desde la antigua Grecia se le atribuía al fruto del granado este tipo de propiedades afrodisiacas y relacionadas con la fecundidad, por el hecho de que se trata de un fruto con abundantes semillas.

Hay estudios que han investigado acerca de esta propiedad, y han podido comprobar que el zumo de granada puede llegar a aumentar hasta un 30% los niveles de testosterona; además de mejorar el deseo sexual tanto en hombres como en mujeres.

Además, se está investigando acerca de si la granada influye de manera positiva sobre la movilidad de los espermatozoides.

Uno de los problemas que suelen darse con mayor frecuencia cuando hablamos de los riñones es el hecho de que se formen en ellos cálculos renales (las conocidas y temidas piedras en el riñón).

Las dietas elevadas en sal, potasio, fosforo y proteínas favorecen la aparición de este tipo de problemas en el riñón.

La granada es baja en potasio y en otros elementos que hemos citado anteriormente, por lo que su consumo no va a afectar en este sentido. Además, genera cierto efecto diurético ayudando a la depuración de los riñones.

El hecho de que la granada ayude a reducir los niveles de colesterol LDL va a suponer un efecto favorable para todas aquellas personas que padezcan de tensión elevada.

La acumulación de colesterol en las arterias es una de las causas más frecuentes que hacen que este problema aparezca, unido también a las dietas elevadas en sal.

Ya hemos visto antes que la granada también es baja en sodio, por lo que resulta la fruta perfecta para todas aquellas personas que padezcan este problema.

Ya hemos hablado acerca de los beneficios que puede aportar la granada a nuestra piel. Estos beneficios van a ser varios:

El acné es un tipo de patología que aparece como consecuencia de un desequilibrio hormonal o de diversos problemas digestivos, y que suele afectar a buena parte de la población, especialmente a la gente joven y adolescente.

Debido a la ayuda que va a suponer la granada para diferentes problemas digestivos, va a permitir suavizar notablemente los efectos de esta enfermedad.

La granada contiene una gran cantidad de antioxidantes muy beneficiosos para la piel. Además, contiene componentes que permiten prolongar la vida de los fibroblastos, las células que se encargan de producir colágeno y elastina, dos elementos imprescindibles para que la piel se mantenga tersa y joven.

El zumo de granada también ayuda a reparar parte del daño producido por el sol sobre la piel, y para ello se deberá aplicar directamente sobre la misma.

El cáncer de piel es uno de los tipos de cáncer más frecuentes que aparecen sobre la población. Los radicales libres son agentes encargados de potenciar el efecto de las células cancerígenas.

La gran cantidad de antioxidantes que contiene la granada va a permitir frenar la acción de estos radicales libres sobre el organismo.

La granada tiene un excelente poder regenerativo para las células de la piel, además de contar con propiedades antiinflamatorias.

Todas aquellas personas que sufran psoriasis o algún tipo de eccema en la piel se pueden beneficiar de las propiedades de la granada para calmar los efectos de estas patologías.

La granada mejora la elasticidad de la piel, algo que se consigue cuando esta cuenta con un buen estado de hidratación.

El aceite de granada aplicado sobre la piel mejora enormemente este estado de hidratación, algo de lo que se pueden beneficiar aquellas pieles más secas, con arrugas o con irritaciones.

Para las pieles grasas será de mucha utilidad también, ya que previene la aparición de putos negros y de acné.

Otro dato importante que se debe conocer acerca de este superalimento es su información nutricional. Por cada 100 gramos de granada vamos a obtener:

Por lo general, la granada es un alimento que no presenta ningún tipo de peligro para las personas. Sin embargo, sí que se deben tener ciertas precauciones en determinados casos a la hora de consumirla:

El consumo excesivo de granada puede llegar a producir una leve intoxicación. Los síntomas de la misma son la aparición de mareos, náuseas, dolor estomacal, dolor de cabeza y cierta dificultad para poder respirar

Sí se está consumiendo algún medicamento existe el riesgo de que ciertos componentes de la granada interfieran en la acción de los componentes del medicamento.

Los más frecuentes son los casos en los que se consumen medicamentos para controlar la tensión arterial. En estos casos lo adecuado es consultar antes con el médico.

Es posible que algunas personas presenten alergia a determinados componentes que forman parte de la granada. En estos casos puede aparecer hinchazón en cara y boca, urticarias o la imposibilidad de tragar o respirar con normalidad.

La granada no es ninguna fruta rara o poco habitual a la que no estemos acostumbrados, por lo que seguramente conozcamos diferentes formas en la cual la podemos consumir.

La forma de consumo más habitual de la granada es en crudo, para lo cual únicamente hay que extraer sus semillas del interior y consumirlas.

Estas semillas se pueden comer solas, junto a zumo de naranja, ensaladas, o con otras frutas a modo de macedonia.

El zumo de granada es otra de las formas más habituales en las cuales se puede consumir este superalimento. Se trata de un formato muy cómodo, pero cuenta con el inconveniente de que se elimina el aporte de fibra al organismo procedente de las semillas.

Por último, los extractos o concentrados de granada son un formato que está ganando mucha popularidad en los últimos años, ya que es una forma muy cómoda de aportar todas las vitaminas, minerales y componentes de este alimento.

Se trata de suplementos nutricionales en forma de cápsulas o pastillas y que se deben tomar con agua, zumo o cualquier otro líquido.

En caso de querer optar por este formato siempre se recomienda consultar antes con un especialista médico que nos indique sobre la idoneidad, o no, de tomar este tipo de suplementos.

Ahora que ya conocemos las virtudes de la granada es el momento de empezar a obtener todos sus beneficios para, así, mejorar nuestro bienestar.